La Nieves González, responsable de la seccióde recolzament a la docència i a la recerca de la Universitat de Sevilla, és una pesona molt dinàmica que vaig conèixer primer a twitter i després van poder trobar personalment (“desvirtualitzar”) a l’EBE10 que va tenir lloc a la mateixa ciutat. La Nieves porta a més un interessant web, Bibliotecarios 2.0, on s’hi poden trobar moltes idees interessants respecte de innovacions en biblioteques i universitats (també Lideratge en biblioteques).
Ara n’he vist un interessant post titulat El organigrama de la Biblioteca Universitaria: ¿por qué lo hacemos tan mal? on explica el cas d’una bibliotecària de Cardiff, Sonja Haerkoenen, que ha rebut encàrrecs de projecte a partir de les aptituds i actitud més enllà de la descrició formal del seu lloc de treball. A part de conèixer el cas d’aquesta bibliotecària gal.lesa, ben interessant, val la pena recollir la reflexió de la Nieves González:
¿qué se tiene en cuenta en las bibliotecas universitarias españolas, a la hora de decidir quien hace qué, cual es su cometido y sus responsabilidades?. Únicamente se observan las competencias que aparecen ligadas a su puesto de trabajo pero no las competencias o habilidades que se tienen y se pueden demostrar. Estamos atados a nuestro puesto de trabajo. Tan solo podemos aspirar a hacer aquello que aparece reflejado en él. No se tienen en cuenta ni las aptitudes, ni la experiencia, ni los méritos, ni las pasiones. Y además se castiga severamente (o sutilmente) si alguien saca los pies del plato, si alguien sube la cabeza por encima de su inmediato superior.
I acaba amb una consideració clau:
En el organigrama de las bibliotecas universitarias españolas, nadie se puede mover del sitio asignado (al que concursó en la mayoría de los casos) so pena de no salir en la foto.
No cal afegir-hi gaire res més, el que diu de les biblioteques segurament que es pot estendre a d’altres serveis. Canvis les coses costa molt. Les persones que treballen a la universitat són valuoses, però l’estructuració una mica massa inflexible, malgrat que tothom creu que hauria de ser més flexible. No és fàcil canviar, les tradicions, hàbits i costums estan arrelats. caldrà seguir-hi reflexionant.
Gracias Miquel por traer a tu blog mi reflexión sobre el organigrama de la Biblioteca Universitaria. Seguramente las bibliotecas tan solo reflejan el espíritu de la institución de la que dependen, la cultura de la organización que, como dice Javoer Celaya es una de las primeras cosas que cambian en un entorno 2.0.
Nieves, estoy totalmente de acuerdo con tu apreciación. Me ha gustado tu reflexión sobre el organigrama de una biblioteca, porque creo que es extensible a toda la organización universitaria. Hay ya algunos intentos con resultado positivo donde se rompe el organigrama formal, pero hay que recorrer aún mucho trecho. Hay que saber combinar respecto a lo existente con una actitud constructiva ante los retos del presente.